Fleetwood Mac no alcanzó el “éxito de masas” hasta la década de los ochenta con canciones tan conocidas como Everywhere o Little Lies , sin embargo han sido un grupo que a lo largo de su trayectoria han sabido adaptarse a los tiempos y corrientes musicales que les eran contemporáneas.
El álbum Bare Trees es un ejemplo de esa transición de un estilo a otro, con el fin de la década de los sesenta y su anterior sonoridad blues al comienzo de los setenta con un marcado estilo rock.
Así pues, en este artículo te contamos curiosidades del álbum, analizamos las canciones y te demostramos que, aunque los Fleetwood Mac de los setenta no son tan conocidos como lo serían una década después, también merecen mucho la pena.
Creación del álbum

Bare Trees es el sexto álbum de la banda anglosajona Fleetwood Mac. Fue sacado a la venta hace cincuenta años, en marzo de 1972.
Fue grabado en De Lane Lea Music Centre en Wembley, Inglaterra. Estos estudios contaban con una gran variedad de equipos de grabación, haciéndose populares entre las bandas del momento, que iban a grabar allí, como: The Animals, Deep Purple, Rolling Stones o Jimi Hendrix Experience. Tras su renovación en 1971, recibieron la visita de una entonces banda de glam rock que quería hacer pruebas: Queen.

Pero volviendo a Bare Trees, fue el último álbum en el que encontramos a Danny Kirwan, quien se marchó durante la gira de promoción. El grupo estaba formado por: Christine McVie (teclados), John McVie (bajo), Mick Fleetwood (batería), Bob Welch (guitarra) y Danny Kirwan (guitarra).
Sin embargo, los músicos en la banda siguieron cambiando durante la década de los setenta debido a problemas internos. Así, a la formación en 1973 se añadieron Bob Weston (guitarra) y Dave Walker (voz), a quienes encontramos en su álbum Penguin de 1973.
Kirwan fue la persona clave en cuanto a la composición del álbum, quien cerraba una etapa con él tras su importante contribución en los álbumes posteriores Kilin House (1970) y Future Games (1971). De hecho, comenta Peter Green que fue Kirwan quien aportó novedosas ideas a la banda y contribuyó enormemente a sacarles del estilo blues y comenzar en la corriente rock.
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El crítico musical Bud Scoppa afirma en la revista Rolling Stone que la presencia de Kirwan convierte a Fleetwood Mac en algo más que un simple grupo bueno de rock.
En este álbum Fleetwood Mac va definiendo una personalidad musical post-blues que será la que veremos desarrollarse a lo largo de todos sus álbumes de la década de los setenta. De hecho, el blues siempre ha estado en las raíces del grupo. Uno de sus fundadores, el bajista John McVie, fue miembro en 1963 de los Bluebreackers.
El disco alcanzó el puesto 70 en la Billboard 200, debutando en el 175. Se mantuvo en lista un total de veintisiete semanas. También se posicionó en las listas de éxitos de diversos países europeos. Además, en 1988 fue certificado como Disco de Platino por la Recording Industry Asociation of America (RIIA).
Canciones del álbum
Child Of Mine
Canción aparentemente alegre, con una letra que habla sobre la ausencia del padre biológico de Kirwan en su vida.
Es una canción, como todas las posteriores que veremos, que camina muy bien, con todos los instrumentos moviéndose bastante. La importancia que el grupo da a la instrumentación queda latente.
Encontramos a mitad de la canción una zona cadencial constante que aporta novedad y mayor movimiento.
En la segunda mitad, la guitarra dobla la melodía de voz sobre una base de profunda percusión, algo que se repetirá también casi al final.
The Ghost
El sonido de flauta en realidad es un Mellotron, fundamental en la canción.
Es una canción fuerte y enérgica, en la que apreciamos también ciertos toques country. En general, en cuanto a la instrumentación, se aprecian una gran variedad de colores.
La voz, en cierto modo rasgada, suena muy bonita en el estribillo con esas otras voces que actúan de coro, panoramizadas cada una.
Homeward Bound
Comienza con la percusión y guitarras a las que se suman el órgano, bajo y teclados. Sigue la misma línea de carácter que las otras canciones.
La melodía de voz es muy rítmica en las estrofas y melódica en el estribillo.
El estribillo aporta cierto toque melancólico y, tras él, el piano se convierte en el protagonista de la canción.
Ya en el final, con la guitarra melódica, el clímax se dispara.
Sunny Side Of Heaven
Es la primera balada que encontramos en el álbum. Comienza de forma muy luminosa, como si estuviésemos bajo el sol en verano.
La guitarra eléctrica toma protagonismo. Esta es la canción prueba, como antes hemos mencionado, la importancia que el grupo le daba a la parte instrumental.
Bare Trees
El título está inspirado por el poema que escucharemos en la última canción del álbum, cuya letra es una metáfora del paso de los años y la llegada de la muerte.
Comienza con guitarras distorsionadas sobre el fondo musical. Encontramos también protagonismo del bajo junto a la voz, que la dobla en momentos concretos. Además, se nota que la voz es considerada por parte de la banda como un instrumento más, y no como el instrumento principal.
Se da una gran importancia al ritmo en cuanto a la construcción de las melodías haciendo que la canción sea muy interesante, con mucho movimiento.
Juegan también con el panorama y diferentes sonoridades.
Sentimental Lady
Es otra balada, bastante nostálgica y bonita, delicada y colorida.
En el estribillo encontramos un gran colchón musical y una segunda voz que hace de coro a la principal.
Danny’s Chant
Comienza con un solo de guitarra muy distorsionada. Poco después se une el conjunto instrumental con gran fuerza, aportada mayormente por la percusión.
La melodía vocal no tiene letra, solo son dos voces, grave y aguda, que intervienen en el conjunto adornando la canción.
Aunque hay mucho movimiento instrumental, realmente es una canción bastante estable.
Spare Me A Little Of Your Love
Encontramos una melodiosa línea vocal así como un bonito coro en el estribillo. Realmente parece una canción no tan experimental como las anteriores, sino más estándar.
El órgano aporta brillo a la mezcla que, al final, acelera inesperadamente, ofreciendo dinamismo y frescura.
Dust
Canción más “sombría” que la anterior. La voz susurrante y las líneas suaves de guitarra aportan un toque melódico.
La letra procede de un poema fechado en 1910 escrito por Rupert Brooke, conocido posteriormente por sus sonetos sobre la Primera Guerra Mundial.
La mezcla es bastante brillante y realmente las melodías de voz no son nada sencillas rítmicamente.
Al final la canción parece decelerar con la pérdida de instrumentos.
Thoughts on a Green Day
No es una canción ni una letra de Fleetwood Mac, sino un poema grabado y escrito por Mss. Scarrott, anciana vecina de la banda. Sin duda, es una curiosa forma de acabar el álbum.
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