Existen grandes canciones que han logrado posicionarse en las TOP del mundo en sus épocas y algunas otras incluso, a través de los años han conseguido seguir siendo éxitos imprescindibles en las listas de música de muchos.
Hoy les comparto algunas historias detrás de canciones icónicas que pocos conocen y que dieron origen a tan brutales piezas.
Come Together – Abbey Road (1969)
Esta canción fue escrita por J. Lennon con el fin de apoyar la campaña política de Timothy Leary, quién ese mismo año disputaría las elecciones a gobernador del estado de California. Timothy era un hippie, activista anti guerra, psicólogo e impulsor de la legalización de drogas como el LSD.
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La campaña (fallida por cierto) se auto proclamaba: “come together, join the party”, y en la que Ronald Reagan sería el ganador de forma contundente, ya que Leary sería enviado a prisión por posesión de marihuana poco antes de las elecciones.
REHAB – Amy Winehouse (2006)
Escrita por su misma intérprete, narra la experiencia negativa que tuvo con su padre al tomar la decisión de enfrentar su terrible problema de alcoholismo. Amy estaba negada a recibir atención especial que le ayudara a controlar su vicio.
Desafortunadamente su padre sólo veía en ella una “mina de oro” por lo que siempre fue más importante concluir las fechas de sus conciertos y los shows programados que la misma adicción de su hija, quién, fue hallada sin vida el 23 de Julio del 2011 en su apartamento. Rehab ganó tres Grammy en 2008.
Rolling in the deep – Adele (2011)
Esta canción fue escrita por Adele después de haber terminado su terrible relación con su ex novio Alex. Cuenta que posterior a una llamada telefónica que concluyó en una discusión con insultos y demás, se puso a escribir la canción que nos presenta una gran connotación llena de energía y despecho.
Con los sentimientos encontrados y a flor de piel, Adele nos presenta una pieza que consiguió ser la quinta más vendida en el 2011 y ganadora a tres premios Grammy.
Tears in heaven – Eric Clapton (1992)
A la edad de 4 años y medio Connor el hijo de Eric, cayó del piso 53 de un rascacielos en Manhattan, Nueva York. Nueve meses después Clapton escribiría la canción Tears in Heaven en memoria de su pequeño hijo fallecido. Dicha canción lograría mantenerse tres semanas consecutivas en el número uno de las listas de 1992 y le haría ganar tres premios Grammy en 1993.
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