Maligno es la nueva obra del director James Wan, un director que ya nos tiene acostumbrados a un terror bien particular con películas como El Conjuro y Annabelle por nombrar algunos ejemplos, pero también a un estilo absolutamente gore con películas como Saw. En el medio de ambas, hay producciones tan variopintas como Furious 7 (de la saga de Rápido y Furioso) y Aquaman.
Maligno fue estrenada el 10 de septiembre de 2021 y James Wan no solo la dirige, sino que la co-produce y la co-escribe por lo que tiene mucha influencia en toda su creación.
En su reparto podemos ver a Annabelle Wallis (The Mummy y Annabelle), Maddie Hasson (Twited y Mr. Mercedes) George Young (Home y Containmet) y Jean Louisa Kelly (Ant-Man y Mr Holland´s Opus). Además co-escribieron la obra junto a Wan, Ingrid Bisu y Akela Cooper.
Maligno es un homenaje completo al cine de terror de los 80’s y 90’s, pero en especial al terror de las películas clase B o “B Movies”. Esas películas de Blockbuster que podías ver un viernes o un sábado en la noche en un VHS o incluso en un Betamax, pero con giros muy modernos al final y creo que bastante arriesgados.
Teniendo eso en mente y teniendo en cuenta que Wan es amante del gore, creo que la película no va a tener tonos grises en la crítica: o te va a gustar porque te vas a sentir identificado con esas películas que viste en tu niñez o adolescencia (porque tienes más de 40 años) o la vas a detestar porque la verás como una cosa barata y de mal gusto.
Ya las críticas en Rotten Tomatoes apunta a esa división de criterios; el Tomatometro le da un 76% de puntuación, mientras que la audiencia solo un 52%.
Revisemos un poco más a profundidad lo que esta producción de James Wan nos trae.
Maligno: Un homenaje a las B Movies (ATENCIÓN SPOILERS)
Revisar esta película en fotografía, dirección, actuación y producción, creo que no agrega mayor valor al análisis. Porque, para mi, hasta por allí empieza el homenaje a un cine de terror que genera lo que genera esta película: amor u odio, pero nunca indiferencia.
Las actuaciones no son especialmente relucientes, sin embargo, logran apropiarse del papel que cada uno de los protagonistas tienen en la película, que además tiene en la particularidad de ser como actuaciones muy planas, de ser muy expresivos con el miedo al gritar (Jump Scare), otra vez, muy al estilo de un terror de hace años.
La fotografía es muy de los 80’s, acercamientos a rostros desencajados, llorosos o en plena histeria que era el recurso que se usaba en ese tiempo para crear una atmósfera atemorizante o de desasosiego.
La música acompaña a la película sin ser demasiado especial, solo hubo un punto donde hubo un quiebre de querer pasar de una situación tensa a otra en teoría mucho más calmada que me hizo preguntarme si la música había sido un error, pero sigue siendo parte de todo el esquema de usar recursos muy viejos y que han entrado en desuso, al menos de la forma que los usó Wan.
Veamos el resto de las particularidades de Maligno
Lo primero es que no hay puntos muertos. Ya en menos de 5 minutos veías gente volando por los aires y una pelea con el “ente maligno” y lo que más me sorprendió y agradecí es que luego no bajamos a una calma de un desarrollo aburrido, sino que cinco minutos más adelante, volvíamos a ver de nuevo al ente con la misma fuerza y sin ningún reparo en aparecer.
Los clichés. La película está plagada de ellos y puedes verlo de dos formas: es una película de relleno, nada que ofrecer y solo te quitaron el dinero a la entrada del cine; o es un homenaje a múltiples películas.
Vestimentas muy parecidas a “Halloween” o “Screem” también responden a estos guiños, así como una especie de garfio (espada/puñal) tipo al que usaron en “Se lo que hicieron el verano pasado”.
El color rojo de las luces de neón de las clásicas películas de suspenso. El cabello largo y enmarañado de El Aro, El niño no nacido, o un hijo producto de una violación de películas como The Omen. El marido borracho o loco de The Shining. Incluso, pudiera decir, y de allí que haya gente que pueda parecer una burla, el ser “Maligno” creo que tiene su inspiración en Alien El Octavo Pasajero.
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También hay obviedades de las películas de terror. El expediente perfectamente conservado en un hospital abandonado desde hace 30 años, además de encontrarlo fácilmente. El voltear, otro expediente, justo en la parte que necesitas ver. Matar a 15 o 18 policías, pero justamente no matas a los dos que te han estado persiguiendo (aunque tampoco se puede decir que fue blandengue con ellos). El que le presten atención a dos desconocidas para tratar de resolver un caso. Y como esas, varias otras, donde se dan esas acciones solo porque… el guion lo necesita ¿no?.
Si estás preparado para ver todo esto junto, creo que puedes disfrutar la película como yo lo hice. Si el ver estos clichés todos juntos te parece que más bien están es “rellenando” la historia, creo que la película te va a aburrir de sobre manera.
A pesar de todo anterior, la película tiene cosas interesantes y novedosas… quizás demasiado novedosas para coexistir con todo lo anterior.
Maligno: Lo novedoso de la película de James Wan
Si bien muchas de las películas clase B de los ochentas tenían una trama simple y hasta poco inteligente donde la protagonista se metía en una casa embrujada porque si o porque así lo mandaba el guion, aquí se le da un porque a todas esas “inconsistencias” y es porque el ser maligno le hace ver otra realidad a su huésped.
De igual forma, el ser “maligno” le impide ver obviedades en algunas otras situaciones (seguir camino a lavar la ropa, cuando te acaba de pasar alguien corriendo en una casa sola) o ser testigo de un asesinato porque te “teletransportaste” a la escena del crimen.
Todo tiene explicación en la forma tan particularmente “científica” que ese ser “maligno” está atado a la protagonista… no es por una brujería, no es por un demonio, no es por una maldición… es, literalmente, un tumor.
Un tumor que (y al final sino no fuera una película de terror) tiene una características bastante espeluznantes y de gore en la forma como convive dentro de la protagonista. A algunos pareciera molestarles que un tumor tome estas características fantásticas, pero aunque exacerbado, no deja de ser espeluznante tal y como lo presentan.
Pudiera decirse que el terror es ese finísimo arte de balancearse entre lo posible y lo fantástico, y quizás aquí se fueron un poco mas de lo debido a lo fantástico, pero a mi forma de ver, no se desbocaron, hubo libertades en lo que al “maligno” se refiere, pero aun así le dieron un contexto medianamente creíble.
La otra novedad en la película, es que el malo, cuando desata su poder, lo hace realmente con todos. No es solo atacar a uno o dos personajes de la trama, tampoco es una casa que se traga así misma (cual Poltergeist), y no ha pasado nada en el vecindario. Es que el ser maligno, aniquila (sí, aniquila) a toda una comandancia de policía y sin mas, se va a seguir con su venganza. Ah, sin contar que antes mató a todas las reclusas de una celda.
En algún momento sentí estar viendo una escena de Matrix, específicamente en la escena de pelea en la comandancia, donde se veían movimientos bien modernos de lucha para un ente diabólico. Porque además el ente maligno pelea con el cuerpo invertido al de un ser humano normal, es decir, pelea desde la espalda, lo cual me pareció bastante novedoso.
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Por otra parte y como punto adicional, hay críticos que pareciera que no terminaron de ver la película, o sencillamente la adelantan para ver solo tramos de ella, porque no entiendo como pueden decir que de un momento a otro, la protagonista, domina al ente como si nada y prácticamente toma hasta sus poderes.
Quizás esta fue otra de las novedades de esta película, mientras que en una película ochentera, el protagonista al final vence al malo sencillamente porque es el bueno y los buenos siempre ganan; aquí hay una explicación de porqué la protagonista gana valor al final de todo para recuperar el control y encerrar al ente maligno.
Maligno es una película de terror con momentos marcados con un estilo gore y que tiene una influencia sumamente marcada en el terror de hace 30 y 40 años. Eso la hace un producción con un collage muy particular. El cine de terror es muy llamativo, para los que nos gusta, pero también es un cine muy complicado de lograr porque nuestros miedos como seres humanos estás mas enmarcados en patologías que rayan en el dramatismo más que en el terror.
Hemos mutado nuestros miedos externos (demonios, oscuridad, asesinos) a temores más internos (soledad, desprecio, inconformidad).
Creo que por ello el cine de terror es cada vez mas complejo de trabajar, sin embargo, no pongo en duda que esta es una apuesta novedosa, que no va a dejar a nadie indiferente, pero que busca aportar a esta modalidad del cine y lo hace bastante bien.